El brazo de la muerte:

Comparto algo que he aprendido en un curso impartido por Salvatore Settis. Ha utilizado esta expresión “el brazo de la muerte” para describir literalmente una imagen utilizada en la pintura. El brazo de la muerte: el brazo inerte que, atraído por su propio peso, cae descolgándose del cuerpo. El brazo que aparece repetido en tantas interpretaciones del entierro del Cristo. La descripción verbal es bella. La representación también. Sin embargo, el brazo de la muerte procede de la antigüedad clásica: la guerra de Troya, el traslado del cuerpo de Patroclo por Menelao.
Ese brazo que cae condensa todo el significado de la pérdida de vida. Es el mismo brazo que aparece en el cuadro de Marat asesinado, mucho tiempo después, y que también encontramos en un fotograma de Passolini en la Ricotta y, más cercano aún, en una video-creación de Bill Viola.
No sé que me fascina más, si la pervivencia en el tiempo de tal modelo, si su traspaso intercambiable de lo mítico a lo religioso y a lo profano también, o la contradicción que me produce la asociación de la representación de ese brazo, generalmente fuerte, musculado y lleno de fisicidad ( no en vano procedía de los guerreros de Troya) en esa vertical pronunciada, tan en contraposición con la horizontalidad de la muerte.